viernes, 29 de abril de 2011
Memorias de mi fiesta real
No me sorprendió cuando el mayordomo colocó sobre mi mesa Juan Luis XVII un sobre dorado con el escudo real. Era viernes de ramos y no pensaba en otra cosa que no fuese el traje que debía vestir para una ocasión tan importante. Sí, recibí una invitación a la boda real. Aunque las otras me parecían tan reales como esta, no podía ocultar mi alegría por constatar que ésta era de verdad verdad.
Conocí al príncipe durante mis vacaciones de verano por las costas paraguayas. Tanto él como yo compartimos el gusto por la geografía y las bellas artes. Las horas se pasaban minuto a minuto y trazábamos un plan para recorrer las sabanas y los pantanos andinos desde la Patagonia hasta Surinam en moto de agua.
Me llamaba mucho la atención el hecho de que el príncipe tenía una facilidad para componer sonetos shakesperianos con rimas bien estructuradas. Tal vez por eso era conocido como el príncipe del Rap.
Llegado el día, viajé con mi amada esposa hacia tierras reales en donde nos esperaba una comitiva conformada por esclavos de la guardia real. El recorrido por los pinares abarrotados de frondosos cedros lo hicimos en un convertible sin techo característico de esas tierras mediterráneas del oriente.
Nos hospedamos en un castillo muy hermoso, de esos que aparecen en las películas y en los clásicos literarios de Mozart, ese gran escritor galo. Mi esposa me habló sobre un cuadro que vio en uno de los corredores y no pudo ocultar una extraña pena ajena al ver un cuadro pintado por un señor que se había arrancado una oreja tras perder en una apuesta de póker.
Ya en la iglesia, escuchamos los novenarios y los cantos gregorianos. ¡Qué voz la del trío Los Gregorio! Una joya del séptimo arte. El cura vestía un manto dorado y era escoltado por dos santeritos bien bonitos, ambos vestidos de blanco. Una boda del primer mundo que conjugaba el amplio espectro religioso. Hay que ver que aún nos queda mucho por aprender de estas tradiciones milenarias.
La fiesta real dejó mucho qué desear. Uno, habituado a tener una visión amplia de mundo y consciente de la crisis económica mundial, puede comprender que es necesario reestructurar el presupuesto para dicho acontecimiento. El hambre y la sed me tenían algo decaído. Los platos eran simplemente de mal gusto: caracoles, crema de hígado de ganso, huevos de pescado y un queso azulado cuyo olor espantaba hasta a los gatos, seguramente estaban en rebaja en el supermercado. Entiendo que cada país tiene su cultura y que es necesario ser cortés y respetarla, pero todo tiene un límite.
Las bebidas eran otro tema aparte. Inconcebible que sólo sirvieran cidra Cristal y vino. En mi país una fiesta sin un buen escocés con Coca Cola no es fiesta. No había cocteles tradicionales de esos que ponen a la gente a bailar, esos que vienen con sombrillas y pedazos de fruta en el borde de la copa.
Uno de los invitados pasó toda la noche hablándome del Conde de Montecristo pero la verdad ese señor nunca apareció por la fiesta. Seguramente ya le habrían llegado los rumores sobre la comida.
También me hablaron mucho de las Bodas de Fígaro, al parecer fue tan buena que tuvieron que hacer un intermedio para luego continuar. ¡Eso sí es una fiesta! Nunca pude dejarle mi tarjeta para que me agregara a su lista de invitados. Es una pena no haber conocido al señor Fígaro. Por lo que entendí es cantante al igual que Lady Ga Ga; vaya joven tan particular para su jerarquía real. Debe ser familia de Lady Di y Lady Marmalade.
Ya estoy en casa con mi mujer. Mis amigos no creyeron todo lo que les conté y juré que la próxima vez los llevaría a conocer esas extravagancias del mundo real. Me gustaría presentarles a todas esas personas que conocí para que vean que no miento.
Por el momento, me sumergiré en esas maravillosas historias del gran premio nobel de la paz, Paulo Coelho. Eso sí es historia universal.
¡Aur boa! (adiós en francés, por si no saben)
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Epselente tanta curtura me impakta jajajaja. Muy bien escrito, hablando en serio ahora :D
ResponderEliminarGracias, bro! Tenía mucho tiempo sin escribir. Ya viene más!!
ResponderEliminarLlegué a este blog por casualidad y lo primero que leo me encanta :D Excelente forma de mezclar y alterar, al mismo tiempo, elementos de la realidad para crear una especie de realidad paralela. Me gustó mucho! Saludos :)
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